El canterano Francisco Noguerol se retira del fútbol profesional

11 de junio de 2015
Francisco Noguerol, en la rueda de prensa de su despedida
Con el fin de la temporada en la mayor parte de las competiciones profesionales, son muchos los cambios de jugadores y entrenadores en los banquillos para todos aquellos equipos que comienzan a planificar la próxima temporada; uno de esos cambios tuvo lugar el pasado domingo en el Carlos Belmonte.

El ex-jugador del Celta y canterano Francisco Noguerol (Cea, 09/07/1976) jugó su último partido como profesional vistiendo la camiseta del Albacete Balompié en el encuentro que cerraba la competición, en el cual además fue titular y disputó los noventa minutos de un partido que perdieron por 0-1 ante el Racing de Santander.

Una despedida que ya anunció la pasada semana en una rueda de prensa en la que estuvo acompañado del vestuario y los dirigentes de un Club del que era capitán. Se retira del fútbol como jugador, pero seguirá plenamente vinculado al fútbol tras aceptar una propuesta para ser entrenador del Albacete B, que jugará la próxima temporada en Tercera División.

Una larga trayectoria en la que ha disputado 18 temporadas como profesional, que comenzó en el Celta B en la temporada 96/97. Posteriormente estaría cedido en el Pontevedra CF y en el Racing de Ferrol antes de llegar al primer equipo en el año 2000. Salió fuera para ser una pieza clave en el Elche CF que militaba en Segunda y, tras su paso por Salamanca y el Albacete, regresó de manera definitiva a Vigo.

Tras su vuelta, defendió la camiseta durante dos temporadas (2008/2009 y 2009/2010) en las que fue capitán, pero volvió a irse; primero recaló en el Girona en Segunda División, antes de fichar de nuevo por el Albacete en Segunda B, donde necesitó tres años para alcanzar el ascenso que le ha permitido disfrutar de esta última campaña en el fútbol de plata.

Se despidió del club y de la afición con la siguiente carta:
"Ha llegado mi turno, el momento tan temido para cualquier deportista, la retirada. Han sido muchos años, sé que soy un privilegiado por haber podido alargar tanto mi carrera a un buen nivel pero a pesar de todo, este momento me asusta, lo reconozco. 
Más de media vida dedicándome profesionalmente a lo que desde pequeño era una pasión, un sueño casi inimaginable, ser futbolista profesional y que hoy se acaba para mí. Miles de entrenamientos, cientos de partidos, infinidad de vivencias y experiencias que te llevan al límite tanto en los buenos como en los malos momentos y que solo como futbolista puedes sentir. 
El fútbol me ha dado la oportunidad de conocer y compartir muchas horas con una gran cantidad de personas y, sin duda, una de las cosas que más me enorgullece ahora que me toca volver la vista atrás es el comprobar los buenos amigos que me llevo de un mundo tan competitivo y en el que, en muchas ocasiones, priman el egoísmo y los intereses particulares por encima de todo y no es fácil hacer amistades. 
Me gustaría dar las gracias  a todas las personas que de uno u otro modo han tenido relación conmigo a lo largo de estos años. Desde el primer al último entrenador, la multitud de compañeros que he tenido, los médicos, fisios , utilleros, trabajadores de los clubes en los que he estado, prensa, aficionados… casi siempre me he sentido valorado y respetado e incluso las personas con las que no he congeniado, que por supuesto las hay,  han dejado en mí experiencias y enseñanzas útiles en mi vida, o sea que gracias a ellos también. 
He tenido además la fortuna de vivir una de mis mejores etapas como futbolista en estos últimos cuatro años, esta segunda etapa en el club que ahora me acoge, el Alba. Cuatro años increíblemente intensos y complicados en los que rodeado de grupos humanos excepcionales hemos podido ir sorteando multitud de problemas y adversidades. La consecución del ascenso la temporada pasada y el poder irme con el club consolidado en el fútbol profesional son para mí un buen punto y final. Creo que es el momento idóneo. 
Me voy sintiéndome útil y entrenando al máximo hasta el último día y por supuesto me gustaría competir a tope  y ganar mi último partido como jugador, así lo he hecho siempre y así me gustaría dejarlo. 
Quiero agradecer, por supuesto, al Albacete Balompié la oportunidad que me brinda de poder seguir relacionado con el mundo del fútbol, ahora desde otro prisma, y formar parte de su organigrama técnico. Me siento muy identificado y querido tanto en el club como en la ciudad y es para mí un gran privilegio  seguir formando parte de ellos. Espero devolver toda la confianza depositada en mí, por trabajo e ilusión no va a ser. 
Por último, quisiera agradecer a las personas que me quieren, mis amigos de toda la vida, mi pareja y en especial a mi  familia por todo el apoyo que siempre me habéis dado. Sin vosotros este sueño no hubiese podido hacerse realidad. Si algo malo tiene el fútbol para mí es todo el tiempo que he estado alejado de vosotros. 
Sois lo más importante en mi vida y sé que me he perdido muchas cosas a vuestro lado. Tiempo y experiencias que ya nunca podremos recuperar y por el que os pido mil perdones. Sé que me queréis tal y como soy  y me perdonáis porque sabéis que el fútbol es parte de mi vida. Mi objetivo y mi empeño es que ,al menos, os podáis sentir orgullosos de mí y todo este esfuerzo siga mereciendo la pena".

Desde aquí le deseamos mucha suerte en su nueva etapa.


Publicado por Redacción